Conocí a Santiago hace mucho tiempo, cuando yo sólo soñaba con dedicarme a la literatura y él ya se ganaba la vida con el Arte, con mayúsculas. Yo no sabía quién era ni podía imaginármelo y, desde luego, él desconocía mis sueños y únicamente me saludaba con cordialidad porque me había criado en el mismo barrio en el que él vivía.
Y así, sin saber quiénes éramos, ya de adultos, un día nos encontramos tomando café en el mismo lugar y comenzamos una conversación intranscendente. Una palabra siguió a la otra, una réplica a la siguiente y me encontré con que el hombre que me saludaba de pequeña era un "buen hombre", en palabras de Machado. Y no están las cosas para expulsar de nuestra vida a los buenos hombres que nos vamos encontrando en el camino; de tal forma fue fraguándose, en un crisol lento y seguro, una incipiente amistad.
El otro día volvimos a coincidir ante un café y Santiago me anunció su última creación: La palabra y el tiempo. No podía por menos que haceros partícipes de ella.
Él es un autor teatral, poeta y compositor leganense (sí, de donde el monstruo. ¡Ay que ver la de artistas que da la zona!). Su producción creativa es muy amplia y sus creaciones han sido cantandas por artistas de la talla de Isabel Pantoja, Los del Río, Niña Pastori, Paco Ortega e Isabel Montero; pero hoy quiero presentaros un nuevo disco que acaba de editar. Algo realmente especial.
Lo ha titulado La palabra y el tiempo y está formado por versos musicados por él mismo. Los poemas pertenecen a 16 grandes autores de la poesía mundial: Lorca, Darío, Celaya, Machado o Miguel Hernández... Aunque también ha incorporado nuevos valores. Los arreglos son de Diego Magallanes y la producción de Paco Ortega. Juan Carlos Mestre y Nicolás Guillén son los poetas elegidos por Gómez Valverde para convertir sus versos en música.
Dice Santiago sobre su propia obra: "En el mar de sus cinco sentidos les dejo navegando este sueño que tuve. Brindo porque en sus aguas, las de ustedes, las nuestras, esta propuesta lírica, sin distancia, alcance buen puerto".
No descarto pedirle que me permita utilizar su música para el book-trailer de mi próxima novela. Realmente son composiciones para soñar. Lamento no poder dejaros una muestra, ya sabéis el problema que existe con los derechos de autor y, sobre todo, con la SGAE.
Desde aquí le deseo el mayor de los éxitos. Si la vida fuera justa, y le diera a cada uno lo que se merece, no necesitaría esos deseos míos.
Gemma.
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